29/11/14

PALABRA PATRIA, CASA BLANCA

Aparecido en Laberinto, Milenio, el 29 de noviembre de 2014.

* Este texto lo entregué antes de que Peña Nieto se apropiará de la frase "Todos Somos Ayotzinapa"; creo que esta apropiación (y, a su vez, la de "compas" por parte de las protestas) reitera la lógica discursiva que aquí explico.




PALABRA PATRIA, CASA BLANCA

Si analizamos el lenguaje verbal de las protestas por Ayotzinapa, ¿qué nos dicen de la relación de la sociedad mexicana con las palabras?

Estas son palabras clave del 2014 mexicano: “Fuera Peña”, “Ayotzinapa”, “Todos Somos Ayotzinapa”, “Fue el Estado”, “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”. Todas estas palabras tienen algo en común: son palabras para volver Adentro.

Son palabras que desean recuperar un límite. Un sistema de vida que en realidad es transnacional, es ocultado por un nombre altamente local: “Ayotzinapa”. La fuerza de esta palabra reside en producir la ilusión de que el problema es local.

Fuera Peña” nos dice que pensamos nuestra realidad como algo cerrado, auto-contenido y por eso se imagina la salida del presidente como la solución. Igual sucede al pedir “Estado de derecho”, otro anhelo doméstico.

“Fue el Estado” (…mexicano) no sólo es una acusación a un gobierno que se deslinda de responsabilidades sino el sueño de que la globalización nunca llegó aquí, de que PAN y PRI mantienen la soberanía.

Si la sociedad aceptara que lo ocurrido rebasa con mucho lo nacional, quizá no sabría cómo luchar, contra quién; por ende, imagina que el enemigo es principalmente interno.

¿Podrían las protestas aceptar que fue el capitalismo (es el capitalismo)? ¿Que Ayotzinapa es Ayotzi-Nafta? Como es Nafta-Narco todo lo que ocurre aquí y allá.

Las protestas están funcionando con palabras falsas pero útiles, es decir, ideológicas, que las protegen del shock de lo real. 

Palabras para formar un caparazón (en un momento global). 

Nótese la insistencia de los números en los últimos descontentos; de YoSoy132 a Los 43, como si los números a la vez que rebasan el poder contenedor de las palabras de auxilio, asimismo, acuden para darnos la certeza de que el límite puede ser contado.

Hay una ilusión nacionalista, una nostalgia de lo local, coloreando las protestas y al hacerlo se aíslan de su contexto mundial: las explosiones globales de los últimos tiempos, desde la primavera árabe hasta Occupy, desde Chile hasta Grecia. Son batallas semi-populares contra una misma guerra neoliberal.

¿Pero sabe la sociedad mexicana cuál es la guerra o quiere meter la cabeza en una fosa para no ver nada más?

En Ayotzinapa los exterminaron; en California, por ahora, les suben colegiaturas. Pero es la misma macro-economía, las mismas compañías arreglando negocios con políticos (intercambiables).

En las mismas fechas que Ayotzinapa sucedió algo similar en Saweto-Ucayali (en la Amazonía peruana). Y en Palestina.

Las palabras de la protesta en Nafta del Sur nos dicen que las palabras están siendo usadas para creer en una Vida Nacional.

Esta ideología, por cierto, es el punto de acuerdo entre el gobierno y las protestas: la familiar palabra patria. El lenguaje como nuestra propia Casa Blanca.



DETENCION (SECUESTRO) DE SANDINO BUCIO


"Condenamos la detención arbitraria y tortura de nuestro amigo y compañero el poeta y estudiante SANDINO BUCIO DOVALÍ. Exigimos que cese la violencia del Estado en contra de los estudiantes y de la población en general".


Suma tu firma:

28/11/14

AYOTZINAPA Y EL PLAN MEXICO


Por favor, pásenlo a sus contactos en México y Estados Unidos. Es necesario que en ambos países se sitúe lo sucedido en el contexto de la región transnacional de América del Norte y no sólo como un problema del "Estado" (mexicano).

El gobierno norteamericano está impulsando la militarización de México, es tiempo de que abramos los ojos a esta realidad, ampliamente documentada.

Les recomiendo revisar este link:
http://ustired2.com

27/11/14

CONTINUA LA NUEVA "CIVILIDAD" DICE PEÑA NIETO


Las nuevas medidas de Peña Nieto son parte de la militarización de todo Norteamérica y, en el caso de la ciudadanía, la desaparición de los "ciudadanos" y su transformación en "civiles".

El 13 de septiembre publiqué esto: "La nueva civilidad en la nueva polémica"

22/11/14

AYOTZINAPA Y LA CREDIBILIDAD DE LOS INTELECTUALES


* Publicada el sábado 22 de noviembre de 2014 en Laberinto (Milenio).


* Crédito de la imagen pendiente (me la pasó un amigo hace unos minutos).


AYOTZINAPA Y LA CREDIBILIDAD DE LOS INTELECTUALES

Ayotzinapa también pone en crisis la credibilidad del aparato intelectual.
Por ejemplo, ¿recuerdan que hasta hace poco existía una gran campaña —en México y Estados Unidos— contra la “narcoliteratura”? Se le acusaba de exagerar y mitologizar. ¿Cómo explicarán ahora esos periodistas, críticos y académicos que efectivamente el narco lo permeó todo? No admitirán su error. Confiarán en la desmemoria o, peor aún, inventarán nuevos “brillantes” argumentos contra la realidad.
¿Y qué pueden decir ahora los ironistas de la derecha literaria que juraban que nada podía cimbrar ya al país? Nada. No podrán admitir que el descontento mayoritario ha refutado ya al nihilismo de la minoría literaria.
Intelectuales opinan sobre Ayotzinapa en entrevistas o ferias del libro. Pero nada dirán de cómo su prestigio fue construido desde el gobierno.
Nótense las posiciones políticas que toman estos escritores. Son generalidades. Y al margen de sus publicaciones principales.
Este es un rasgo central del discurso intelectual mexicano vigente: en Facebook se quejan (variablemente) del gobierno. Pero esos mismos escritores, sin embargo, son de derecha en revistas o libros.
En redes sociales están “indignados”; en “literatura”, en cambio, siempre han sido “cosmopolitas”. Lean sus libros: cada uno de ellos está hecho para distinguirse o burlarse de Los Jodidos.
Sucede que los escritores mexicanos temen perder privilegios. Por eso en Facebook critican a Peña Nieto pero en su colaboración con Krauze son conservadores.
Quizá también esta notoria (y callada) incongruencia, discrepancia entre sus dichos en redes y sus publicaciones profesionales es señal de un cercano punto de quiebre.
El aparato literario mexicano se volvió insosteniblemente mediocre. Los libros que apenas hace tres años eran señalados como los mejores se han vuelto ya inactuales.
La literatura mexicana se reduce hoy a un mero control de daños. Ayotzinapa también resquebraja esa simulación.
El hecho de que hoy el líder de la República de las Letras (Enrique Krauze) tenga que deslindar abiertamente al presidente, al gobierno en turno, de su responsabilidad en el genocidio (y la narco-colonia norteamericana que es México) es algo que la historia sabrá recordar.
En pocos lustros, Krauze se ha emPEÑAdo en desacreditarse totalmente. Pero al ser la punta de la pirámide intelectual mexicana, los niveles inferiores no pueden criticarlo. Si cae Krauze también caen ellas y ellos: sus puros espejismos.
Hace un año decía aquí que la verdadera oposición cultural de este país son profesores anónimos que buscan crear conciencia en los jóvenes. Hoy lo reitero.
Y el gobierno y el capitalismo lo saben. Y por eso cada rato los manda criminalizar, los manda reprimir, los manda matar.
Ay, Ayotzinapa, ¿cuántos años más buscará la mentira enterrar a la verdad?


***

Otras columnas en que he tocado el tema de la compra-venta de intelectuales:

"Los intelectuales y el regreso del PRI" (2012)
"Carlos Fuentes y el PRI" (2012)
En una entrevista sobre intelectuales y el poder: Sin Embargo (2012)
"La cultura en el primer año de Peña Nieto" (2013)

20/11/14

¿FUE EL "ESTADO"?

Aquí otra imagen con otra lectura sobre lo ocurrido en Ayotzinapa.



* Si alguien quiere puede circular la imagen por cualquier medio.

16/11/14

FUE EL CAPITALISMO


* Si a alguien le interesa esta esquela puede difundirla por cualquier medio.

FUE EL CAPITALISMO.

15/11/14

REVUELTAS ENTRE MARX Y UNA DERECHA DESNUDA

* Publicado en el suplemento Laberinto del diario Milenio, 15 de noviembre de 2014.
(No dejen de leer todo el suplemento, dedicado a Revueltas esta semana).

Revueltas entre Marx y una derecha desnuda

En su centenario, lo más vigente de José Revueltas es su posición política: ser una literatura de izquierda. Por ello la crítica literaria mexicana de derecha disimulada repite hasta el cansancio que lo que supuestamente ha envejecido más de Revueltas es su marxismo.

Ese es el alegato del dossier que Letras Libres dedicó a Revueltas en su número pasado. Pero la revitalización del marxismo en la última década y su auge global muestran lo anacrónico de esa escuela de crítica literaria pacentrista.

En Marx and Freud in Latin America de Bruno Bosteels publicado por la prestigiosa editorial Verso en 2012 se le dedican dos capítulos a Revueltas. Bosteels muestra lo vigente de las discusiones marxistas de Revueltas, y lo considera afín a Walter Benjamin.

El libro de Bosteels no está exento de la idea de los años noventa del fin del marxismo. Pero, en lo general, el análisis de Bosteels facilita mostrar que en México la crítica literaria tipo Letras Libres sigue viviendo en 1993.

Al pensar a Revueltas en este siglo, surge de inmediato la imposibilidad de separar lo literario de lo político. Revueltas elaboró la que quizá sea la literatura marxista más estéticamente lograda del continente americano en el siglo XX.

Hoy es fácil que compañeros suyos que antes eran de izquierda y hoy son de derecha o, mejor dicho, de la derecha (y por eso ninguno admite jamás ser derechista) retraten a Revueltas como un “personaje” (o, peor aún, un “personajazo”), ya que esa táctica sirve para restar importancia a un autor como Revueltas.

Entonces, ¿cómo leer a Revueltas? La siguiente generación de lectores tiene la oportunidad de leerlo como la represión gubernamental y luego la crítica de derecha (“liberal”) ha evitado: leerlo desde el nudo intenso entre la forma literaria y sus ideas políticas.

Para evitar la lectura despolitizante que está tan instaurada en México, es recomendable que el nuevo lector primero adentre en Ensayo sobre un proletariados sin cabeza y Dialéctica de la conciencia y luego siga con la narrativa de Revueltas. 

Este orden de lectura hará posible no perder de vista la relación dialéctica —espiral— entre el marxismo y su narrativa. Conocer al Revueltas total y no sólo al que la derecha reduce a una tendenciosa biografía krauzeana, en la que a cada supuesta exaltación de Revueltas le sigue alguien opinando de lo equivocado de ser un izquierdista como Revueltas. 

Ese nuevo lector seguramente escuchará que los ensayos de Revueltas son pesados o ilegibles; opiniones que, irremediablemente, provienen de críticos que no pueden entenderlos por su falta de lecturas teóricas, aquellas que precisamente Revueltas reelabora.

Contra la tendencia de verlo como una “leyenda” o un anecdotario melodramático, Revueltas espera que se retome su lectura política.

Los años noventa han terminado. Marx ha vuelto. Revueltas nunca se ha ido.


***

Otra columna que he escrito sobre Revueltas: 
"José Revueltas 1914-2012": leer

8/11/14

RULFO Y EL "OTRO" RULFO


Aparecido en el suplemento LABERINTO del diario Milenio el 8 de noviembre de 2014.

Rulfo y el “otro” Rulfo

Ocurre una reorganización de la historia de la literatura mexicana y una gran resistencia a esta reorganización. En esta lucha de archivos, han (re)aparecido documentos que fulminan un rumor contra el máximo escritor mexicano: Juan Rulfo.

Pedro Páramo en 1954 fue editado por la UNAM, Fundación Juan Rulfo y RM y contiene facsímiles de siete fragmentos de la novela de Rulfo publicados en tres distintas revistas en 1954 —año previo a su impresión en libro— y secciones del mecanuscrito original.

Los estudios están a cargo de Jorge Zepeda, Alberto Vital y Víctor Jiménez; y enfatizan que contrastar estos textos con la versión final muestra el dominio estético de Rulfo. 

Lo ejemplifican en el efecto producido por el cambio de nombres de personajes y la novela. El paso de “Tuxcacuexco” a “Comala” o de “Bonifacio Páramo” a “Abundio Martínez” son leídos como señales de culminación estética, toques finales que conducen la obra a una dimensión superior.

Lo mismo ocurre en el tránsito de los distintos títulos de la novela antes de llegar a Pedro Páramo: “Los desiertos de la tierra”, “Una Estrella junto a la luna” y “Los murmullos”.

En el tercer estudio, Jiménez subraya que comparar estas versiones preliminares con la novela publicada, además, entierra para siempre el mito de que Alí Chumacero, Antonio Alatorre o Juan José Arreola ayudaron a Rulfo a convertir unos “montones de cuartillas” en una obra maestra, como tanto se ha dicho. 

Pero, repensemos, estructuralmente ¿de dónde surgió el mito del supuesto co-autor de Pedro Páramo?

Jiménez desarrolla una explicación. Me atrevo a agregar otra.

El mito del co-autor de Pedro Páramo surgió porque la clase literaria mexicana había imaginado un perfil de cómo debía ser su máximo escritor. Y Rulfo no se parecía a esa expectativa.

Esa es la causa de fondo de que la República de las Letras no pudiera aceptar que Rulfo fuera el genio detrás de esos dos libros perfectos.

Surgieron, entonces, alegatos para decir que Rulfo no era ese genio o lo era gracias a otro. Un agente secreto que había logrado transformar el borrador bárbaro de Rulfo en una Forma Perfecta.

Fantaseando ese otro, la clase literaria pudo “cumplir” su fantasía, porque la imagen de ese supuesto otro (tipo Chumacero, Alatorre, Arreola) aplicando una medida correctiva a Rulfo ofrece una fórmula que se parece un poco más al Escritor Tradicional-Moderno fantaseado.

(El mito del Posible Rulfo hace poco dio un giro, que ya no “explica” a Rulfo por el apoyo de otro escritor sino por el apoyo de la CIA, según fantaseó recientemente un académico norteamericano).

Rulfo no cumplía el perfil que la clase literaria había fantaseado para su máximo realizador. La fantasía es tan fuerte que sigue viva. Da patadas de ahogado.



* * *




7/11/14

LINK PARA UN TEXTO

Hace dos años apareció publicado en la revista Yagular (de Oaxaca) un texto que escribí titulado "Notas del marxismo en México", donde comienzo hablando del fracaso de la izquierda mexicana y  luego abordo la función de la teoría según una concepción marxista.

Aquí están dos links donde puede leerse:

Yagular 4
Yagular 4 en ISUU